EL POZO DE LA MUERTE - DOUGLAS PRESTON Y LINCOLN CHILD

En la costa de Maine se encuentra una misteriosa isla en la que, según cuenta la leyenda, está enterrado desde hace siglos un tesoro de incalculable valor. Pero sobre él pesa una terrible maldición: todos los que han intentado recuperarlo han muerto en extrañas circunstancias.

CLAIMING HIS CHRISTMAS TREE TOPPER - ALEXA RILEY

Rudolph ha estado esperando hasta que pueda despedir a la mujer que ama... porque la única manera de tenerla es que no trabaje para él.
También la está empujando hacia el trabajo que realmente quiere, así que espera que eso compense todo el asunto de “estás despedida”.

YO SOY TU DIVORCE PLANNER - ALEXIA MARS

Divorcio, divorcio y divorcio. ¿Te imaginas que esas ocho letras fuesen sinónimo de alegría, de liberación? No, ¿verdad? Todavía no, lo sé. Ahora duele oírlo, escuece. Suena a fallo, a infidelidad, a monotonía, a fracaso… También para mí, en su día. Hasta que apareció ella.

DATING YOU HATING YOU - CHRISTINA LAUREN

A pesar de tener las probabilidades en su contra, en una vergonzosa e incómoda reunión en la fiesta de Halloween de un amigo en común, Carter y Evie se llevan bien de inmediato. Incluso se dan cuenta de que ambos son agentes de alto nivel en empresas competencia en Hollywood, lo que no es suficiente para apagar el fuego. 

LATIDOS DE UNA BALA - ALEXANDRA ROMA

Berta viaja a Nápoles con sus dos mejores amigas para practicar italiano. Esa es la excusa. El verdadero motivo es pasear en esas calles llenas de adoquines hasta no sentir los pies, comer pizza hasta que le duela el estómago y bañarse en el Mediterráneo hasta que se le arruguen las yemas de los dedos.

¿Y SI LO PROBAMOS...? - MEGAN MAXWELL

¡Hola!
Me llamo Verónica Jiménez, tengo treinta y ocho años y soy una mujer independiente, trabajadora, autónoma y, según dicen quienes me conocen, bastante cabezota y controladora. Vale, lo confieso, lo soy. Pero ¿acaso hay alguien perfecto?

NOCHES DE KARNAK - NIEVES HIDALGO

Muchos siglos atrás, las divinidades egipcias —ya sabemos que los dioses son caprichosos— regalan la tablilla de la Vida Eterna a un campesino. El extraordinario objeto pasará de mano en mano hasta que el faraón Tutmosis III lo hace enterrar convencido de que será para siempre.